Se divide magisterio de Acapulco en torno al regreso a clases

Representantes de 40 delegaciones de la Secretaría de Educación estatal aseguraron que en 350 escuelas no se reanudarán las clases la semana entrante, como acordaron secretarios generales sin -acusan- considerar a las bases.

Héctor Briseño, corresponsal
Publicado: 30/09/2011 18:55

Acapulco, Gro. Horas después de lograr un aparente acuerdo entre maestros y autoridades para el retorno a clases en escuelas públicas del nivel básico del municipio, tras un mes de suspender labores en protesta por la inseguridad, un grupo de docentes aseguró que no existen garantías para regresar a clases.
Por un lado, un sector del magisterio de Acapulco negó que las bases vayan a retornar a las aulas el próximo lunes, y convocó a una nueva marcha para el próximo miércoles en este municipio, con el objetivo de expresar su malestar porque la inseguridad y la violencia no ha disminuido en el puerto, pues las noticias relativas a hechos sangrientos continúan circulando, así como nuevas amenazas a docentes, aseguraron.
Nuevos rumores surgieron acerca de una manta que supuestamente apareció en la secundaria general 200 de la colonia Zapata, en la que delincuentes amenazan con levantar (secuestro sin intención de pedir rescate) a niños y maestros si éstos últimos no pagan su derecho de piso.
En conferencia de prensa en la coordinación de los servicios educativos de la región Acapulco-Coyuca de Benítez, representantes de 40 delegaciones educativas de la Secretaría de Educación Guerrero en Acapulco, en su mayoría miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG), aseguraron que son 350 escuelas, principalmente de la periferia, donde no se reanudarán las clases la semana entrante.
Los inconformes acusaron a los secretarios generales de las delegaciones educativas que sí aceptaron firmar el acuerdo con el gobierno estatal de "traicionar a las bases".
Uno de los representantes de la CETEG, Felipe de la Cruz Sandoval, denunció que en la reunión sostenida el jueves por la tarde entre profesores y el gobernador Ángel Aguirre Rivero, "ya estaba cocinado el acuerdo del regreso a clases sin el consentimiento de las bases; firmaron el documento a título personal", y manifestó que el acuerdo no incluía dos puntos que trabajadores de base consideraban claves para signarlo: que el gobernador se hiciera responsable si un mentor sufría un atentado violento, y que si la administración estatal no cumplía con las estrategias de vigilancia y protección planteadas una vez que se reiniciaran las labores, los docentes suspenderían nuevamente las clases.
Subrayaron que hasta que no haya secuestros y ejecuciones en el municipio, los maestros se sentirán seguros para regresar a las aulas.
Por separado, la vocera de los maestros en paro, Edith Zurita Petatán, quien es integrante "institucional" del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sostuvo que "debido a la premura del tiempo, los delegados no pudieron informar a las bases del contenido del acuerdo definitivo", e insistió que fueron 86 los secretarios generales los que aceptaron signar el documento con el mandatario estatal.
Recalcó que el regreso de los profesores a las aulas será gradual, de acuerdo al contexto de cada centro educativo, y se mantendrán las subcomisiones de trabajo para evaluar las estrategias de protección policial aplicadas por autoridades de los tres niveles de gobierno.
Antes, cuando Zurita Petatán intentó dirigir su mensaje a los cerca de 600 profesores reunidos en la coordinación educativa, fue abucheada por la mayoría de los presentes, quienes la acusaron de "vender el movimiento".
Una de las peticiones de la CETEG desde la integración de comisiones para establecer mesas de trabajo con el gobierno del estado fue que el cargo de vocero y representación de los secretarios generales se rotara entre los propios delegados, lo que miembros "institucionales" del SNTE nunca aceptaron.
Desde el 25 de agosto pasado, docentes de la zona suburbana del puerto señalaron delitos como extorsión y secuestros contra profesores y sus familiares, por lo que determinaron iniciar el cierre gradual de escuelas y marcharon en dos ocasiones por la avenida Costera Miguel Alemán para exigir garantías de seguridad.
Se espera que el lunes entrante un buen porcentaje de centros escolares retorne a sus labores.